Esa película de la revocación y de destruir las instituciones con base en la voluntad popular” ya la hemos visto. Siempre termina en pobreza y decepción.
Para López Obrador la incertidumbre no es error, es estrategia. Busca concentrar el poder en la figura presidencial, y volverse el hombre indispensable.
Para López Obrador la incertidumbre no es error, es estrategia. Busca concentrar el poder en la figura presidencial, y volverse el hombre indispensable.
Para López Obrador la incertidumbre no es error, es estrategia. Busca concentrar el poder en la figura presidencial, y volverse el hombre indispensable.
Tal vez existe una relación sórdida, íntima y cómplice entre los retiemblos del TLCAN y el regreso al autoritarismo. Esa relación existe, opera en las sombras y conspira: El autoritarismo en el poder somete y corrompe y en la economía retrasa e incendia.
La dolorosa experiencia venezolana debiera ser una seria advertencia para México. López Obrador, parece lejos de la veleidad socialista: es sólo un priista decrépito, anhelante de reconstruir el viejo presidencialismo autoritario. Pero sus proyectos se van encaminando a poner en cuestión todo principio de una democracia liberal.
Vista la enorme derrota que nos encajaron nos queda esperar lo mejor, prepararnos para lo peor y construir alternativas para el futuro, conscientes de que Obrador no necesariamente es el tirano, pero esa tiranía está latente en el propio sistema.